Relojes Breitling

Historia  (1.884-1.941)

En 1.884 Léon Breitling abre un taller especializado en la fabricación de cronómetros y maquinaria de precisión en St-Imier en Jura, Suiza. 

Unos años más tarde para hacer frente a la fuerte demanda se traslada a La-Chaux-de-Fonds. 

En 1.914 tras el fallecimiento del fundador, su hijo Gaston se hace cargo de la compañía y un año más tarde fabrica el primer cronógrafo de pulsera y suministra relojes a los aviadores. 

En 1.923 Breitling desarrolla el primer pulsador de cronógrafo independiente. Nueve años más tarde Willy Breitling, hijo de Gaston, se ocupa del negocio. 

En 1.934 idea el segundo pulsador de vuelta a cero que posibilitó la actual configuración del cronógrafo y dos años después Breitling, se convierte en proveedor de la Royal Air Force. 

Historia  (1.942 hasta hoy)

En 1.942 se lanza el modelo Chronomat, primer cronógrafo con regla de cálculo y en 1.952 se crea el Navitimer, reloj capaz de hacer todos los cálculos para la navegación, convirtiéndose pronto en el favorito de los pilotos. 

Diez años más tarde el astronauta Scott Carpenter lleva en su muñeca el cronógrafo Cosmonaute durante su viaje en la cápsula Aurora 7. 

En 1.969 Breitling inventa junto con Büren y Heuer-Leonidas (ver Relojes Heuer) el mecanismo de cronógrafo de cuerda automática. 

En 1.979 Ernest Schneider, piloto y fabricante de relojes se encarga de la marca y cinco años después se lanza el reloj Chronomat con la colaboración de la patrulla de élite italiana Frecce Tricolori. 

En 1.985 aparece el reloj Aerospace, cronógrafo electrónico de titanio, y en 1.995 el modelo Emergency, reloj-instrumento dotado de un emisor de emergencia. 

Tres años después sale a la venta el reloj B-1, un completo cronógrafo multifunciones y en 2.001 se fabrica el mecanismo SuperQuartz, diez veces más preciso que el cuarzo convencional.